En un momento político marcado por retrocesos en derechos y libertades, la comunidad LGBTQ+ en Estados Unidos enfrenta una creciente hostilidad institucional. Desde que Donald Trump retomó protagonismo político, su administración ha impulsado órdenes ejecutivas para desmantelar programas de diversidad e inclusión (DEI) en agencias federales y fuerzas armadas. Al mismo tiempo, ha promovido discursos que niegan identidades trans, restringido el acceso a salud afirmativa para jóvenes y reafirmado una visión binaria del género como política oficial del país.
En contraste, Apple ha decidido mantener firme su compromiso con la inclusión. Con la llegada del Mes del Orgullo, la compañía presentó su Colección Pride 2025, una propuesta estética y tecnológica que busca celebrar la diversidad en tiempos difíciles. El producto estrella es la nueva correa Pride Edition Sport Band para Apple Watch, que destaca por sus franjas arcoíris ensambladas a mano y su diseño único en cada unidad, símbolo de la pluralidad de la comunidad LGBTQ+.
Junto a esto, Apple introduce la carátula Pride Harmony, una interfaz analógica para el reloj que transforma rayas multicolor en números visibles al levantar la muñeca. Este diseño, dinámico y lleno de vida, estará disponible con la actualización del sistema watchOS 11.5. Por su parte, los fondos de pantalla para iPhone y iPad, que también forman parte de la colección, integran patrones similares que cambian de forma y color al interactuar con el dispositivo, y se liberarán con iOS 18.5 y iPadOS 18.5.
Además, aunque la empresa no ha especificado a qué organizaciones LGBTQ+ destinará fondos este año, en ediciones anteriores ha respaldado a entidades como ILGA World y Human Rights Campaign. En un contexto donde marcas importantes han retirado su apoyo a eventos como el San Francisco Pride, Apple apuesta por la visibilidad y la solidaridad como un gesto explícito de resistencia.
