Identificado como Juan Camilo Muñoz Gaviria, fue enviado a prisión tras ser vinculado con el asesinato de Sara Millerey González Borja, una mujer trans de 32 años, en el municipio de Bello, Antioquia. Según la Fiscalía, la víctima fue atacada brutalmente el pasado 4 de abril en el barrio Playa Rica, y su cuerpo fue arrojado a la quebrada La García.
Gracias a una extensa recolección de pruebas —incluyendo más de 120 grabaciones de cámaras de seguridad y múltiples testimonios— las autoridades lograron capturar a Muñoz el 30 de abril, en el mismo lugar donde ocurrió el crimen. A partir de estas evidencias, un juez le impuso medida de aseguramiento mientras continúa la investigación.
La Fiscalía también reveló que, al menos seis personas habrían participado en el traslado de Sara a un solar del sector, donde fue torturada y posteriormente arrojada al afluente. Pese a que fue rescatada aún con vida por familiares y bomberos, murió horas después en un hospital de Medellín.
Por otra parte, los responsables del crimen habrían amenazado a vecinos del barrio para impedir cualquier intento de auxilio, lo que resalta la saña y el control social que ejercía el grupo delincuencial al que se vincula alias Teta. Según el informe oficial, estos hombres formarían parte de la banda El Mesa, conocida por operar en el oriente antioqueño.
En paralelo, el secretario de Seguridad de Bello, José Serrano, indicó que se han adelantado allanamientos y verificación de antecedentes a personas del entorno del sospechoso, acciones que han arrojado más pruebas para la investigación. Esto ha permitido perfilar a los otros presuntos autores del crimen, que aún no han sido detenidos.
Mientras tanto, colectivos LGBTIQ+ y defensores de derechos humanos han calificado el hecho como un crimen de odio y exigieron justicia en una vigilia organizada en Bogotá. Además, las autoridades locales ofrecieron recompensas de hasta 50 millones de pesos por información que permita dar con todos los implicados.
