La Ley de Identidad de Género, promulgada en el Diario Oficial el 10 de diciembre de 2018 y en vigor desde el 27 de diciembre de 2019, ha transformado la vida de miles de personas en Chile. Según cifras entregadas por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), en conjunto con el Registro Civil, más de 10.000 personas han rectificado su nombre y sexo legal en estos cinco años de implementación.
De este total, el 91,6% corresponde a mayores de 18 años, mientras que un 8,4% son menores de edad, lo que confirma que las identidades de género se reconocen desde la infancia y subraya la necesidad de políticas públicas inclusivas para niñeces y adolescencias trans.
Entre quienes realizaron este trámite, 6.631 son hombres trans (63,9%) y 3.726 mujeres trans (35,9%), dejando un pequeño pero significativo grupo de 22 personas no binarias o intersex (0,2%) inscritas con género X. Este último grupo está compuesto mayoritariamente por personas asignadas como mujeres al nacer (16 casos), frente a 6 que fueron asignadas como hombres.
Los datos también reflejan un panorama por edad. En el grupo de menores de 18 años, 696 son hombres trans y 173 mujeres trans, mientras que 6 personas no binarias o intersex menores de edad optaron por el género X.
La vocera del Movilh, Javiera Zúñiga, calificó las cifras como un avance histórico: “En tres décadas previas a esta ley, solo 750 personas habían rectificado su partida de nacimiento. En contraste, en cinco años, este número creció un 1.283%, un logro extraordinario”. Además, destacó cómo esta normativa ha significado un paso crucial para la dignidad de miles de personas, especialmente para infancias y adolescencias trans.
Este notable progreso confirma el impacto de la ley en la construcción de una sociedad más inclusiva y respetuosa con las diversidades de género. A seis años de su publicación y a cinco de su entrada en vigor, la Ley de Identidad de Género sigue marcando un antes y un después en la lucha por los derechos humanos en Chile.
