Un admirador ha tomado acciones legales contra Madonna, argumentando que la cantante apareció tarde en el escenario y presentó contenido sexual explícito sin advertencia previa. Madonna, con una trayectoria de más de 40 años conocida por su provocación y sensualidad, enfrenta ahora esta controversia.
En la demanda presentada por Justen Lipeles, se señala que ni él ni otros asistentes fueron informados sobre el contenido explícito del concierto de la gira ‘Celebration’. Según la denuncia interpuesta en un tribunal de California, Justen asistió al concierto en el Kia Forum el 7 de marzo y se queja de no haber sido advertido sobre el tipo de espectáculo al que se expondrían.
Además, la demanda detalla un retraso considerable. El concierto, según Lipeles, comenzó con más de una hora y media de demora, y acusa a Madonna de utilizar playback en algunas partes de su actuación. También se menciona que la diva del pop creó un ambiente incómodo al solicitar apagar el aire acondicionado y pedir a los asistentes que se quitaran la ropa si tenían calor, lo que supuestamente provocó malestar físico en algunos espectadores.
En cuanto al contenido sexual explícito, Lipeles afirma que el público fue sometido a “pornografía sin previo aviso”, observando mujeres en topless simulando actos sexuales en el escenario. La demanda, según informó The Independent, acusa a Madonna de incumplimiento de contrato, tergiversación negligente, imposición intencional y negligente de angustia emocional, publicidad engañosa y competencia desleal.
El demandante solicita reembolso y juicio con jurado. Lipeles busca el reembolso de su entrada y/o los beneficios obtenidos por el concierto. Hasta el momento, Madonna no ha hecho declaraciones públicas sobre esta demanda.
Este caso resalta los riesgos de no comunicar adecuadamente el contenido de los espectáculos. La situación podría sentar un precedente en la industria del entretenimiento, subrayando la importancia de la transparencia con el público sobre lo que pueden esperar en eventos de alto perfil.