El 3 de agosto de 2024,el activista LGBTQ+ Yendri Velásquez fue arrestado en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía mientras intentaba salir del país. Según su padre, su paradero fue desconocido inmediatamente después de la detención, lo cual fue denunciado en redes sociales. Velásquez, quien se dirigía a una reunión en Ginebra por invitación de la ONU, fue informado de que su pasaporte estaba anulado antes de ser detenido.
El Observatorio Venezolano de Violencias LGBTIQ+, del cual Velásquez es coordinador, y diversas organizaciones de derechos humanos, calificaron la detención como arbitraria y exigieron su liberación inmediata. Esta detención ocurrió en un contexto de alta tensión política y social en Venezuela, tras unas cuestionadas elecciones presidenciales que ratificaron a Nicolás Maduro en el poder, generando protestas masivas y una ola de represión.
La principal coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), condenó la violencia de Estado ejercida contra quienes no reconocen los resultados de los comicios. Además, la detención de Velásquez no fue un caso aislado; otros opositores y activistas, como el periodista Roland Carreño, también fueron arrestados, intensificando el clima de persecución y hostigamiento.
Finalmente, después de seis horas sin comunicación, Velásquez fue liberado la noche del 3 de agosto en Caracas. La noticia de su liberación fue recibida con alivio por organizaciones de derechos humanos y su familia, quienes agradecieron el apoyo y continuaron exigiendo la liberación de otros detenidos políticos en Venezuela.
