Charli XCX vuelve a generar controversia con el lanzamiento de una edición especial de su álbum Brat, esta vez en un vinilo transparente relleno de un misterioso polvo blanco. Desde su anuncio, el diseño ha despertado tanto elogios como críticas, con algunos considerándolo una ingeniosa referencia estética y otros acusando a la cantante de romantizar el consumo de drogas.
Este vinilo especial, titulado Brat and It’s Completely Different, es una colaboración con la empresa Bad World, conocida por sus ediciones de vinilos poco convencionales. La primera edición, que estará disponible a partir del 28 de febrero, incluirá remezclas del álbum original, con participaciones de artistas como Ariana Grande, Bladee, Shygirl y Lorde. Además, el disco uno contiene el ya polémico polvo blanco en su interior, mientras que el segundo presenta un prensado completamente blanco.
La reacción en redes sociales no se hizo esperar. En Instagram, la cuenta oficial de Blood Records compartió un video mostrando el vinilo en acción, con el polvo moviéndose dentro del disco al girar. Charli XCX comentó simplemente «salt!», en aparente referencia a la sustancia. Mientras algunos seguidores celebraron el diseño como una provocación divertida y alineada con la estética de Brat, otros expresaron su incomodidad. Un usuario de Twitter escribió: “Odio ser el amigo ‘demasiado woke’, pero la normalización de las drogas en esta era es realmente agotadora. He visto cómo destruyen vidas, tanto en lo personal como en lo laboral, y esto me parece dañino.”
No es la primera vez que Bad World juega con conceptos controvertidos en sus lanzamientos. En el pasado, la compañía ha producido vinilos rellenos de líquidos como agua de baño para la banda sonora de Saltburn, miel para el disco de Troye Sivan Something To Give Each Other, e incluso cristales para la colección de grandes éxitos de Elton John. Sin embargo, esta última propuesta ha despertado un debate más intenso, pues muchos la perciben como una alusión directa a la cocaína, una temática recurrente en la era Brat.
Más allá de la polémica, el vinilo ya se perfila como un objeto de colección codiciado. La edición limitada estuvo disponible para preventa en la web de Bad World por un precio de £55.00, agotándose en apenas unas horas.
