El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha instruido a las universidades públicas a ignorar nuevas protecciones hacia estudiantes LGBTQ+, emitidas por el gobierno de Joe Biden. Estas protecciones amplían la ley del Título IX para incluir identidades de género y orientaciones sexuales diversas, además de ofrecer mayores garantías a víctimas de acoso y abuso sexual.
Así, Abbott pidió a las instituciones universitarias no aplicar las nuevas regulaciones federales, calificándolas como ilegales y contrarias al propósito original del Título IX. Y es que esta postura se alinea con la oposición republicana a la protección de los derechos de la juventud transgénero.
Texas ha tomado medidas adicionales para rechazar las políticas educativas de Biden, incluida una demanda presentada por el fiscal general del estado, Ken Paxton, en abril. Además, otros estados conservadores como Virginia, Luisiana, Ohio y Kentucky también han presentado demandas similares contra la expansión del Título IX. De este modo, Texas se suma a más de 20 estados que han prohibido la participación de estudiantes transgénero en equipos deportivos acorde a su identidad de género, mostrando una postura consistente contra estas nuevas regulaciones.